A sus 27 años de edad, el rudo Akuma atesora mucha lona recorrida. Tiene casi catorce años como profesional. Miembro de una destacada familia en la que hay gladiadores y réferis, el saltillense decidió abandonar su casa aún adolescente, con el sueño de hacer una sólida carrera en el deporte de los costalazos.
Su dedicación le valió para posicionarse como uno de los talentos del Consejo Mundial de Lucha Libre, la empresa más importante del país. ‘No ha sido fácil. De hecho a mi me gustan los retos’, comparte Akuma durante su visita a Ovaciones.
‘Soy de Saltillo y aunque mi familia siempre ha estado metida en este deporte, fue hasta los trece años que hice el viaje a la Ciudad de México y pude atestiguar un aniversario de la Arena México. En ese momento supe que quería ser luchador’, comparte Akuma con un físico espectacular y una altura de 1.90 metros.
‘En aquel momento Saltillo y muchas ciudades del norte del país estaban copadas por el narcotráfico y la delincuencia. Alguna ocasión que salí con los compas a dar la vuelta no faltó alguien de la maña que se acercara para invitarnos a participar. Éramos chavos muy sanos, pero el ambiente era feo. Eso influyó bastante para que mis padres me dieran autorización para hacer el viaje a la capital’, confiesa el atlético gladiador.
‘Mi mamá no estaba de acuerdo, pero mi papá que fue réfere sí. Fue así como inició mi aventura. Soy medio hermano de Demus y él me recibió en la Ciudad de México. Debido a sus múltiples compromisos prácticamente me crié solo aquí. Aunque siempre estuvo al pendiente’, agrega Akuma, quien tomó ese nombre por influencia de una cuñada luchadora japonesa.
‘Akuma en japonés significa Diablo. Va muy bien con mi personalidad, porque arriba del ring me transformo’, comparte Akuma, quien no utiliza máscara, sino que se pone maquillaje.
‘Hace algunos años tenía máscara, pero la perdí en una función del Consejo Mundial de Lucha Libre. No me sentía bien y fue que decidí utilizar el maquillaje’, comparte el rudo norteño, que luce muy tranquilo durante la entrevista.
‘Cuando subes al cuadrilátero aparece la magia. Hay personas que me conocen desde hace mucho tiempo y me han llegado a ver algún día bajoneado por alguna gripa por ejemplo, pero en cuanto me ven subir al ring se dan cuenta que todo cambió. Incluso hasta mi tono de voz. La lucha libre es un trabajo mágico. Aquí ocurre magia’, agrega.
‘Ahora que tocamos el tema, recuerdo mis inicios en la ciudad. Aunque en mi familia nos queremos mucho todos, somos muy secos. Muy independientes, pero ocasionalmente llegas a flaquear. Me acuerdo que esa primer año en la capital pasé la Navidad solo. Fue raro, pero ese tipo de cosas te curten y te hacen más fuerte. Como te dije a mi me gustan los retos y cuando me venía para abajo de ahí sacaba fuerzas, porque decía ‘algún día regresaré a Saltillo y me verán para arriba’. Muchas veces lloré a mis padres, claro que los extrañaba, pero soy hombre de retos’.
Respecto al compromiso que le espera mañana en la Arena México, comparte: ‘Tomaré parte en el Torneo Increíble de Parejas, un certamen en el que la dupla ganadora tendrá derecho a participar en el Homenaje a dos Leyendas, por lo que hay mucho en juego’, asevera con alegría.
‘Yo haré dupla con Dulce Gardenia, un luchador con el que traemos pique, pero hay que ser profesionales y ver la manera de ganar este torneo. Ya después saldaré las cuentas pendientes con el exótico ese’, señala al tiempo que aprieta el puño.
En este torneo, las duplas que participarán, además de la que tiene integra Akuma son: Máscara Dorada-Rocky Romero, Ángel de Oro y Flip Gordon, además de Gran Guerrero y Euforia.
Más allá de gustos personales o aficiones, Akuma se considera un profesional de los cuadriláteros, por lo que aunque no le agrada hacer pareja con Dulce Gardenia asegura que saldrá a dar su mejor esfuerzo.
‘Soy un profesional. Ese señor en conjunto con su grupo me ha estado haciendo la vida difícil en la Arena México. Me ha costado mucho trabajo llegar a donde estoy como para que cualquiera me quiera quitar de ahí’.
‘Voy a demostrarle a Dulce Gardenia que soy un profesional y que puedo trabajar en conjunto, pero no voy a permitir abusos de su parte o algún error que me pueda perjudicar. Creo que en la lucha libre no existen coincidencias, por lo que algo raro, por mínimo que me parezca se lo haré notar. Y si por un desafortunado error se equivoca y me golpea, pues también por un desafortunado error se lo regresaré. Como van vienen’, sentencia Akuma, quien es uno de los gladiadores que emergió de la Escuela del Consejo Mundial de Lucha Libre en la Arena México.
Debido a su gran tonelaje, fortaleza y estatura poco a poco llamó la atención de los aficionados, lo que le generó muchas envidias con algunos de sus compañeros de bando como El Hijo del Signo y Yago, que lo desafiaron a apostar su máscara junto a la cabellera de Camorra. Aquel día perdió la máscara, pero ganó como profesional de la lucha libre.